José Samaniego Piñeiro,
Fotógrafo de Moda
De entre
los fotógrafos que hemos tenido en nuestra Auria, probablemente la biografía más singular sea
la de José Samaniego Piñeiro; nacido en
Baza (Granada) hacia 1888, siendo muy joven se traslada a Galicia, Ourense, a
la zona de Cástrelo, de donde
probablemente era oriunda su madre.
Los
datos de sus primeros años son escasos, pero ya nos hablan de su habilidad para
el dibujo, quizás esa fue la principal causa de que pudiera entrar como aprendiz en el estudio que los Vascos,
(los hermanos Pablo y Hermógenes Garitaonandia), tenían a comienzos del siglo
XX en la calle de Alba 13, (por ese local pasó también Pacheco y desde hace ya
100 años es el estudio SCHRECK).
En torno
a 1914 como propietario o como encargado (desconozco el dato), se hace cargo
del estudio y se casa con Eduarda Conde
Vigo, vecina de Celanova. De estos años
es la mayor parte de su producción fotográfica en la ciudad, muchas de las
fotos escolares que conozco, los hermanos Maristas eran clientes habituales. Y
otras que se guardaban con muchísima ilusión: Samaniego se convirtió en el
preferido para los novios, llegando a circular entre las parejas la frase: Eso
me lo dices delante de Samaniego, como manera peculiar de pedir
matrimonio.
No tardó
mucho en hacerse un hueco en la sociedad Ourensana, fruto de su buen hacer, y
de su espíritu inquieto, que le llevo a investigar en otros campos; colaborador
habitual de la prensa nacional y local, cubriendo la actualidad provincial, La
Región, Blanco y Negro, Eco de Galicia, Galicia Grafica, Vida Gallega, ¡y como
no!, se le recuerda por ser el primer fotógrafo en colaborar y anunciarse en la
Ourensana Revista “Nós”. Se hizo cargo de las exhibiciones cinematográficas del
Liceo, en sustitución del italiano Barbagelatta (de marzo a junio de 1925);
colaborador de los exploradores se tiene constancia también de su habilidad
para la pintura, y de su capacidad para formar a otros profesionales del arte
fotográfico, como el caso contrastado de Leopoldo Iglesias López. (Foto
Villar).
Los datos que actualmente tengo confirman su presencia en Ourense, hasta 1925, en noviembre de ese año abriría en A Coruña el estudio Foto Royal donde la fotografía y la pintura se hermanaban; de esa época se supone que es un retrato de grandes dimensiones de Primo de Rivera, que debió de ser del agrado del general ya que en un grabado del mismo le firmó un autógrafo con este texto: Al brillante artista José Samaniego , afectuosamente ... ; en ese estudio se suponen los últimos momentos en Galicia, (allí se mantuvo después el estudio de su hijo José Samaniego Conde, lo que en más de una publicación ha sido causa de errores, al confundir padre e hijo) . El 2 de octubre de 1930 comienza su aventura americana: Hollywood, Buenos Aires, New York, y con un lapsus en Madrid, Cienfuegos Cuba.
Ese año solicita y consigue una beca para
perfeccionar conocimientos cinematográficos en EE.UU. sus habilidades fuera de
toda duda, se confirman cuando al poco de llegar, bajo la dirección del gran
Edgar Neville, se encarga de la dirección artística de la película El Presidio, (adaptación al
mercado hispano de la oscarizada The
Big House). Terminado el periodo becado, decide quedarse en América y con frecuencia viaja a la Habana donde expone
sus retratos en miniatura (oleos), que tiene gran aceptación, actores famosos,
personajes de la política, etc. Regresa a España (sin confirmación, podría
haber sido hacia 1934), instalándose en Madrid, aunque de ese periodo poco o
nada he conseguido averiguar, es de suponer que le iba bien, hasta el punto de
que se llevo con él a su hijo Eduardo. (De su vida privada y sus relaciones
familiares no le gustaba que se supiera nada con lo cual obviare comentar.)
Los acontecimientos del 36, por su espíritu
pacifista, lo llevaron a abandonar España y aunque no fue de manera inmediata,
sabemos que en mayo del 37 viaja a Cuba instalándose en la Habana y poco
después en la conocida como “Villa Roja”,
que no era otra que la ciudad de Cienfuegos. Allí sus dotes artísticos a
pesar de que se llevo su cámara de cine y desde luego las de fotos, decidió
encaminarlos a la pintura, labrándose fama en poco tiempo; fruto de ella le
hacían encargos de importancia,
principalmente retratos de personalidades en gran formato. Continuó con
sus trabajos fotográficos aunque más en plan divertimento que como profesión,
dedicando tiempo también a la enseñanza artística. Se encargó de la sección
artística del Ateneo de Cienfuegos y fundó y dirigió una academia de pintura.
En 1940
traslada su residencia a Camagüey donde abre estudio de pintura y también imparte
clases. En 1946 en un viaje a la Habana encuentra la muerte con tan solo 58
años de edad, sin que me conste que en ningún momento regresara a España. Retornaron sin embargo a España y otros
países europeos algunas de sus obras, mayormente miniaturas, (en marfil...), el
palacio de Liria, el de Medinaceli y el de Osuna entre otros cuentan (o contaban) en su colección con obra de
Samaniego. En Ourense que yo sepa únicamente fotografías en los álbumes
particulares de nuestros abuelos y una buena colección de fotografías de
prensa.
Fotos de Samaniego para El Eco de Galicia 1925; Hotel
Roma y una calle de Valdeorras