La de hoy admito que no es excesivamente original, ya que muchos recordamos a doña Concha en esa ubicación, pero tenéis que perdonarme ya que siempre que veo una de "mis fuentes" no me puedo resistir y tengo que mostrarla.
Esta es la que mas usábamos porque en mi infancia mi madre, era a la alameda de "arriba" a donde me llevaba, era mas tranquila que la de "abajo". Y esa fuente del pitorro era donde nos poníamos perdidos de agua, con la conocida técnica del "cerriche": aquella "tan complicada que solo sabíamos los mejores", poniendo un dedo hábilmente en la salida del chorro aumentaba la presión (para que el chorro llegara mas lejos) y con un estudiado movimiento de dedo dirigías su dirección a los amigos despistados....
Otro día siguiendo con esta broma os contare como se hace para que aparezcan los peces de colores en las fuentes ourensanas.....
Pero volviendo a mis fuentes del pitorro, esta es la mas usada, (por cierto en la fotografía, quien bebe lo hace mal, ya que nunca se puede chupar del chorro, si este es muy pequeño, con la técnica del "cerriche" también se puede beber de manera higiénica). Otra que cuando crecí un poco se convirtió en la principal era la situada en la entrada de la Alameda de "abajo" y después fueron las dos que hubo en el jardín en la zona del bosque (lo de lo beber en los baños no era habitual, pero también...), y en San Lázaro también recuerdo otra prácticamente donde hoy creo que existe una (aunque pienso que no funciona).
Mis amigos de mas edad se que me llamaran para decirme que en su época había otras que le llamaban del chorro, en las que había que calcar para que saliera agua, y aun así ellos inteligentemente buscaban las mañas para usar la técnica del "cerriche", pero eso es otra historia....