La fotografía es muy mala, o mejor dicho la calidad de la copia es horrenda, pero aun así la mayoría de vosotros al leer el titulo hayais pensado "Este toleo".
Si, en la imagen se ve la capilla de Los Remedios y su entorno en aquel lejano año de 1958, si no recuerdo mal en aquellos momentos la feria del siete y el diecisiete era lo que daba vida a la zona, bueno sin contar a los niños de salesianos ....
El caso es que no tolee por decir que eso pudo haber sido la estación de autobuses de la ciudad. Y quizás hubiera estado bien, o al menos hubiera evitado un traslado seguramente.
En 1958 los autobuses tenían su parada principal a lo largo de la calle Progreso, conservando una tradición de tiempos pasados en los que el tráfico era muy escaso y la comodidad de bajar del autobús en el centro de la ciudad era algo muy interesante; como sabéis en el entorno del Hotel Roma (hoy Galerías Roma) se concentraban la mayoría de los servicios públicos (audiencia, correos etc) y negocios de la ciudad, pero ya nadie dudaba que aquello era insostenible; por ese motivo se estudiaba el traslado a la zona de los Remedios donde la feria ya tampoco resultaba cómoda (la feria aun mantenía gran tradición agraria y ganadera, y cada vez resultaba más complicado conciliar el negocio con la higiene, cerdos gallinas y vacas por el medio de la ciudad tenían difícil encaje,) y se buscaba su traslado.
El principal argumento para querer instalar la estación de autobuses en la zona era la cercanía con la del tren, así como que en un breve espacio de tiempo se llevaría a aquel entorno el edificio judicial (por la cesión de un terreno a justicia de parte de la alameda del Concejo). Competía el campo de los Remedios con otro espacio en aquellos momentos diáfano como era el actual Porto Carreiro, que contaba con la ventaja de ser más céntrico aun , pero evidentemente peor comunicado (el acceso aún hoy es complicado).
El resultado final muchos lo recordareis y no fue ninguna de esas dos opciones, si no otra intermedia que a los comerciantes de la calle Doctor Fleming les levanto la paletilla, pero realmente para los usuarios y empresas de transporte no fue una opción muy afortunada, cierto es que la plaza de abastos era un polo de atracción para muchos de los viajeros, Unos venían a comprar y otros a vender en ella sus productos, pero "los cristos" que se montaban en la calle eran todo un poema.
Este tema seguro que lo retomo en otra ocasión.... ya que hoy se gesta la cuarta ubicación de la estación de autobuses. Si me lo permitís; acertada ubicación si se dota la zona del Empalme de un buen servicio de autobuses urbanos.....