miércoles, 10 de enero de 2018

La casa del Pueblo

Fotógrafo Desconocido 
Circa 1929
VGDE1929000331
Inauguración de la Casa del Pueblo
Papel prensa, archivo revista Vida Gallega

  Detalles:  Es en los años veinte cuando con el imprescindible empuje de la Federación Socialista y otros partidos de tendencia izquierdista apoyados por algunos empresarios locales, comienza a ser  una realidad la consecución de una Casa del Pueblo.
 Constantes reuniones en sedes de agrupaciones políticas, los Jaimistas en la calle de la Paz eran anfitriones habituales, fueron dando forma al proyecto, que pasaba por una estancia provisional en el edificio conocido por Casa de María Andrea en la calle de San Fernando, (Hoy Hermanos Villar y Plaza do Eirociño dos Cabaleiros), donde se consiguió habilitar un “saloncito” como biblioteca, una sala de conferencias con un aforo más que limitado y una sala de reuniones solo para los directivos, ya que no pasaba de la veintena el número de personas que cabían en su interior.
En estos años dentro de las filas socialistas se destacaba un personaje menudo en tamaño pero grande en obras Manuel Suarez Castro “Manoliño”, quien estaba teniendo un papel fundamental con las obras y funcionamiento del nuevo Hospital Modelo de las Lagunas y había tomado como reto personal la construcción de la nueva Casa del Pueblo.  Donaciones de empresarios, políticos pero sobre todo las que los propios obreros aportaron, permitieron que en  mayo de  1929 se inaugurara  la Casa del Pueblo de Progreso; se culminaba así,  todo un periodo esfuerzo y se marcaba todo un hito en la historia sindical de nuestra ciudad.
A la inauguración que se fijo el dia 1º de Mayo asistió como invitado de honor el escritor y político catalán  Antonio Fabra Ribas (Delegado de la oficina internacional del Trabajo en España) quien pronuncio dos conferencias inaugurales, (mañana y tarde). Y constaban como personajes relevantes del sindicato además de Manoliño, Miguel Serantes, José Casasnovas, Manuel Ferreiro, José Salgado, Amador Casas, José Docampo …..

 Amplio salón para actos culturales , dos salones de oficinas, salón biblioteca espacio para aulas teóricas y practicas etc. .
      Las circunstancias sociales, hicieron que fueran muy pocos los años en que se pudo aprovechar realmente el edificio, al que yo recuerdo en mi infancia años 60 siempre con las grandes puertas cerradas, y en contadas ocasiones escuchaba ruidos en el interior que alguien me comento que eran los chicos del Padre Silva entrenado sus ejercicios circenses.