Pero al mismo tiempo es una de las que mas me gustan de las dos colecciones, ya no porque muestren el gran Hotel de Roma un edificio que muchos echamos de menos en la ciudad, si no porque muestra un momento con mucha vida de la ciudad, la llegada y salida de los coches de linea, y del que hacia el servicio entre la estación de Canedo y los Hoteles. Es curioso ver como convivian autocares con carros de tracción animal , bicicletas y no era dificil ver como los peatones utilizaban sin miedo la calzada en lugar de las aceras, las velocidades no eran de vertigo, pero al final si que habia accidentes.