No podian faltar en la colección estas dos magnificas estatuas. Que aunque ellas no hayan cambiado con el tiempo, si que han visto modificaciones en su entorno, el padre Feijoo, se limito a ver como le hacian una escaleras delante mismo de su figura, que realmente le aportan mejor vision, con lo que fue un gran acierto.
Sin embargo la de Doña Concepcion si que tuvo un pasado turbulento y no libre de discusiones y enfados. Al margen de la conveniencia o no de trasladarla de un parque publico, a un cruce de caminos donde su visión tiene que hacerse desde lejos, lo que no tiene mucha justificación es la perdida del bello pedestal que en su antigua ubicacion tenia, y en el que habia colaborado para su diseño, el gran Parada Justel. Que se le va a hacer, "Agora xa foi, marica non chores...."
