miércoles, 11 de junio de 2025

Tesoros Ourensanos, 2. Un Baltar


 Tuve la inmensa fortuna de conocer a dos grandes escultores, especializados en el manejo del barro, uno incluso se atrevió a intentar enseñarme a utilizarlo, no lo consiguió, por que mis habilidades manuales “tampoco” son mi fuerte. Este osado caballero fue Antonio Berjano, durante dos cursos en la escuela de Artes y oficios, intentó por todos los medios que modelara algo, lo que fuera, pero… al final consiguió por la técnica del churro que hiciera un vaso de barro, ¡menuda proeza la mia!, lo que si consiguió fue despertar en mi la afición a jugar con el barro en el pilón que teníamos en la escuela para recuperar el material que se descartaba, como mis “obras” por ejemplo. Al final Antonio fue amigo y vecino lo que ayudo a que una obra suya sea de mi propiedad, gracias a su hija Victoria.

El otro escultor que presumo de haber conocido, fue Arturo Baltar, amigo y compadre del bueno de Manolo “Santa María”. De Arturo todos conocemos su Belén y escenas, pero pocos tienen la fortuna de poder disfrutar a diario de alguna de sus obras, ¡Bueno!, algunos si, los afortunados ourensanos que o por regalo del propio Arturo, o por adquisición las tienen en sus casas.

Este grupo que hoy os muestro esta en un domicilio particular y fue regalo de Arturo, era un pedazo de pan.  Pero por lo que yo se sus amigos le tenían también mucho cariño, y lo cuidaban…