lunes, 23 de enero de 2023

A ponte dos Peares

 

Puente del tren en Os Peares, realizado por la escuela de Eiffel, sobre la desembocadura de los ríos Sil y Búbal en el Miño.

Hace unos días el diario La Voz se hacia eco de una noticia que para Ourense tenia una gran importancia, pero sobre todo para el pueblo de Os Peares, se refería a la retirada de los andamios que habían permitido levantar el  puente metálico.

Se que los vecinos de Os Peares disfrutan repasando su historia y para ello se muestran muy activos en las redes, (grupo Todos tenemos alguna relación con Los Preares en Facebook) y han tenido la amabilidad de permitirme escudriñar sus recuerdos y fotos, cosa que le agradezco, y por ello de cuando en vez repaso mis datos y busco en las hemerotecas por si entra algo que les pueda gustar. 

A esa noticia del 88 que hablaba de los últimos momentos de la obra del tan deseado puente, uno hoy el recuerdo del porque hubo que rehacer y reforzar ese andamiaje: Fue el 4 de marzo del 86, cuando durante la noche una tremenda riada sin duda motivada por el deshielo en las montañas, dio lugar a que las aguas del Sil portando gran cantidad de ramas y piedras batieran fuertemente  contra la estructura aun en construcción, llevándose el puente provisional de madera que sustentaba la estructura metálica, junto con toda la maquinaria y herramientas que en aquellos momentos no se habían podido retirar. 

La estructura de madera se fue rio abajo y la parte metálica al día siguiente estaba bajo las aguas a 17 metros de profundidad. 

    En Febrero de ese mismo año El Eco de Orense felicitaba a los ingenieros y trabajadores de la obra por el gran trabajo que estaban realizando, ya que en esos días otra crecida del rio no había sido capaz de parar, ni siquiera retrasar los trabajos,  es posible que en esa confianza los daños de la siguiente crecida fueran mayores????. 

 Lo cierto es que finalmente se remataron las obras y las comunicaciones en la provincia lo agradecieron....

Por fortuna el trabajo final se hizo para aguantar lo que hiciera falta.