Este articulo estaba en la recamara, y creo que hoy puede servir para alegrar la reclusión a todos los enamorados de la nieve. Manzaneda, un sueño blanco
Fue un proyecto ambicioso y realmente atractivo, Manzaneda estaba llamada a convertirse en el reclamo de esquiadores del norte de Portugal y de toda Galicia. Por desgracia algo que no pueden controlar ni los promotores inmobiliarios ni los políticos se puso en contra: el clima. Lo que a finales de los sesenta eran nevadas abundantes que desde primeros de diciembre vestían las cumbres de blanco hasta bien entrado febrero, poco a poco se transformó en la situación actual, en la que se han depositado muchas esperanzas en los cañones de innivación.
La aventura comenzó a mediados de los años 40s, y aunque siempre es difícil reconocer al impulsor, en este caso según me contó en su día Pastor Fábrega, fueron los hermanos Andrés y Nazario Villaba de Zamora junto al Doctor Gonzalo Gurriaran (“destinado” después de la guerra civil al Barco) quienes comenzaron a darle cuerpo a esta aventura. El refugio de Fonte da Cova en Peña Trevinca, cuya construcción consiguió el Doctor Gurriaran, permitió organizar estancias que aunque breves servían para fomentar la afición, que dicho sea de paso, tenía que ser mucha, todo lo relacionado con la nieve y la montaña en aquellos tiempos requería de grandes esfuerzos. Llegar a la zona desde Ourense, suponía al menos utilizar tres medios de locomoción, en tren hasta la estación de Sobrádelo de Valdeorras, (hoy creo que no existe esa línea), después en la bañera de un camión que regresara de vacío a las canteras (hoy totalmente prohibido) y el último tramo, “a pie o andando”, cuando había suerte unos burros ayudaban a cargar con lo más pesado del material. De esa época es el origen del Club de montaña Trevinca, hacia 1944.
Supuestamente este fue el primer refugio existente en Manzaneda, año 1968 obra del Club Trevinca
Para ver nacer la estación de Manzaneda, hubo que esperar al comienzo de los años 70´s, en esta ocasión son los hermanos Outeiriño, José Luis y Ricardo (propietarios de La Región) quienes encabezan el proyecto, se construye el hotel Queixa (al que un feroz incendio destruyó poco después), se instalan los primeros remontes, y todo hace prever un futuro complejo deportivo de altísimo nivel.
De hecho aquellos años fueron los realmente exitosos de la estación, la nieve hacía acto de presencia de manera regular y la afición al esquí iba en claro ascenso, a los Fábrega, Ouro, Echegoyen , Tovar etc., los sustituyeron otros jóvenes que rápidamente se apasionaron con la montaña, estos fueron los años de los Redonet, Ferrer, Silva, Penin y como no, los Outeiriño ….
En la fotografía podéis ver que las grúas aun estaban a pleno rendimiento, y ver el remonte funcionado animaba a los aficionados a invertir; de esa época es el complejo de apartamentos Galicia con capacidad para más de mil personas, lo cual unido a la capacidad hotelera del entorno, llevaba las pernoctaciones posibles a cerca de dos mil personas. A eso había que sumar a los ourensanos que no dudaban en subir en sus coches particulares o en los autobuses que los fines de semana hacían el trayecto.
Si os fijáis en el diseño de la estación está todo planificado para disfrutar de la nieve con una comodidad que ya quisieran muchas estaciones suizas. Es del apartamento o del hotel, directamente a las pistas, lo que se llama “a pie de pista”.
Hoy con gran esfuerzo se han mejorado las instalaciones para intentar aprovechar al máximo los días de nieve, los remontes son de lo mejor que se estila en nuestro país e incluso se ha instalado un novedoso sistema de innivación artificial tantos años anhelado. Sin embargo el futuro claramente pasa por reinventarse y conseguir que no solamente sea el esquí el aliciente de la estación, Hípica, Bicicleta, etc. Son algunos de los nuevas actividades que se ofertan al visitante, sin olvidar el entorno...
¡Ahhh ¡!!! También es un espacio ideal para pretemporadas de cualquier equipo deportivo, el Real Madrid puede confirmarlo, ya que estuvo varios años en las excelentes instalaciones de Manzaneda. Los que no lo conozcáis estar pendientes del parte meteorológico, y subid a disfrutar de la nieve, os aseguro que engancha.