Se planteaba en aquellos momentos, la necesidad de afrontar el arreglo de la práctica totalidad de calles de la ciudad; habían sido muchos los años de abandono, y a estos les habían sucedido otros en los que nuestros dirigentes no consiguieron ponerse acuerdo en el modelo de suelo que queríamos para nuestra principales vías, ¿empedrado o asfaltado?. Por fin la corporación se había puesto manos a la obra, y empezando por las calles Galán y Paz Novoa????, (perdón, perdón, Hoy Paseo), junto Lamas Carvajal y Avenida de Pontevedra, en estos casos el aumento de circulación de vehículos en aquel año 36 había recomendado el asfaltado, sin embargo para Santo Domingo y la Plaza del Hierro todo aconsejaba el empedrado; la belleza de la fuente (que muchos erróneamente aún pensaban procedente de Osera como reza en el articulo del Pueblo Gallego) "exigía" que el entorno conservara el porte señorial de un gallego Perpiaño. Otro argumento a favor era el de intentar dar trabajo a la gran cantidad que en esos momentos permanecían en la ciudad sin apenas trabajo y en muchos casos pasando penurias.
Por mis datos causas imprevistas retrasaron las obras, aunque al final se llevaron a cabo, en piedra, y con varios cambios en cuanto a los escalones de la fuente, pero nada que no tuviera solución. Hoy creo que es una de las más hermosas zonas de nuestra ciudad.
Bueno viene todo esto a cuento, como decía en el encabezado, porque quizás sea buen momento para que se renueven al menos unos cuantos viales de la ciudad, (no remendar, arreglar), por citar algunos necesitados, Camino Caneiro, Bedoya, Remedios, Concordia..... ¡ánimo!!!!.
(tengo que revisar datos, pero creo recordar que lei en algun articulo de Maribel Outeiriño que el viejo empedrado de Santo Domingo sirvió para hacer el muro exterior del Instituto Otero Pedrayo....)