Fotógrafo José Pacheco
Circa 1906
TCPJ1906000508
Novillada para olvidar
Papel fotográfico, Todocoleccion
Detalles: El tiempo de manera inexorable va haciendo caer en el olvido, muchas de las tradiciones y costumbres de los pueblos. Hoy cada vez son menos los que lo recuerdan, pero aun tengo algun abuelete, tanto hombre como mujer que me lo cuenta. (aclaro lo de hombre mujer no por la moda actual de diferenciar (cuando se trata de igualar), sino porque aun queda gente que no sabe que a los toros siempre hubo aficionados de ambos sexos).
Pero vayamos al tema: ni puedo ni me atrevo a especular sobre cuál fue el momento en que se celebraron las primeras corridas en nuestra ciudad, pero al menos me constan desde el último cuarto del s.xix. celebrándose las últimas en los 60. El periodo de más actividad es sin duda el primer cuarto del s.xx cuando en algún año la plaza estuvo montada prácticamente seis meses. Antes de las corridas del Corpus se organizaban algunas capeas entre los jóvenes ourensanos, quienes gracias a algún amigo carnicero intercambiaban golpes con una vaquilla que después de unas cuantas carreras terminaba sus días en el matadero municipal. Lo del Corpus era ya cosa seria y normalmente eran corridas de toros, a los que vino algún profesional de buen nivel con su cuadrilla y toda la parafernalia propia de la fiesta. Después entre Santiago (25 julio), San Roque (16 Agosto) y los Remedios (8 Septiembre) era un no parar, eso sí, casi siempre con novilladas, pero era un no parar.
Hoy la fotografía de Pacheco recoge una de las novilladas que durante mucho tiempo estuvo en el recuerdo de los aficionados, y que de alguna manera parece ser que fue la causa de que Don José hiciera varios reportajes fotográficos en la plaza, (varias fotos de las de la colección de 1908 ya están en el blog).
En aquel año de 1906 las niñas toreras habían acudido al coso de Pontevedra para una novillada el 4 de septiembre y el empresario de la plaza ourensana, que aun no habia desmontado el tinglado, se decidió a contratarlas para el dia de los Remedios. No le salió precisamente barato el tema al pobre del hombre, y si llega a saber lo que le espera mejor se hubiera ido a tomar "las aguas" con esas perras.
Cuentan las crónicas que las novilleras Pepita (Mola?) y Lolita (Pretel?) no debían andar en muy buena forma, aunque existió división de opiniones entre los que culpaban del fiasco a los novillos, que en algún reporte de prensa se definian como cabritillos y los que achacaban a la falta de empuje de las chicas el problema. Yo ni entiendo ni me gusta el toreo , así que me limitaré a contar lo que he leído: La Correspondencia de España del 10 de septiembre bajo el titulo: "En Ourense escándalo monumental" nos ofrece uno de los artículos más completos del evento; en el nos cuentan que Pepita diestra en el rejoneo hizo una faena impecable, matando a sus dos adversarios; el problema ocurrió con Lolita que intentado dar cuenta de su primero no conseguía atinar con la manera y este se resistía a dejarse matar, ¡Hay animalitos que tienen esa costumbre, les gusta vivir, qué le vamos a hacer!
el caso es que terminaron por enviarlo de vuelta a los corrales, eso sí con más cortes que un jamón en manos de mi hijo (esto va, por que al chico le gusta la loncha fina...).
Cuando le echaron el segundo a la arena parecía que la muchacha se iba a arrimar un poco mas, ¡pero na!.. Al final se hacía de noche y el público ya no tenía puros, ni almohadillas ni sombreros para tirar y comenzó a reclamar del empresario que devolviera el parné. Este como es lógico se hizo el loco y desapareció. Pero como los ánimos estaban caldeados y algunos tenían ganas de jarana en pública manifestación se fueron todos al gobierno civil (de aquellas en la hoy Diputación Provincial) y pidieron justicia a la autoridad.
El asunto se saldó con una multa al empresario de la plaza amén de la donación de los animales ya "toreados y muertos" para la beneficencia municipal.
Ese mismo año las ordenanzas de la fiesta a nivel nacional prohibieron el toreo a las mujeres, que durante años solo pudieron acudir a la plaza de espectadoras.
Si os apetece profundizar en el tema, las redes tienen unos cuantos artículos sobre el tema, como siempre: unos a favor y otros en contra; a mi como no me gusta el toreo ni ningún tipo de daño innecesario a los animales..... lo de que sea hombre o mujer quien lo haga. Como que me da igual.....
Novillada para olvidar
Papel fotográfico, Todocoleccion
Detalles: El tiempo de manera inexorable va haciendo caer en el olvido, muchas de las tradiciones y costumbres de los pueblos. Hoy cada vez son menos los que lo recuerdan, pero aun tengo algun abuelete, tanto hombre como mujer que me lo cuenta. (aclaro lo de hombre mujer no por la moda actual de diferenciar (cuando se trata de igualar), sino porque aun queda gente que no sabe que a los toros siempre hubo aficionados de ambos sexos).
Pero vayamos al tema: ni puedo ni me atrevo a especular sobre cuál fue el momento en que se celebraron las primeras corridas en nuestra ciudad, pero al menos me constan desde el último cuarto del s.xix. celebrándose las últimas en los 60. El periodo de más actividad es sin duda el primer cuarto del s.xx cuando en algún año la plaza estuvo montada prácticamente seis meses. Antes de las corridas del Corpus se organizaban algunas capeas entre los jóvenes ourensanos, quienes gracias a algún amigo carnicero intercambiaban golpes con una vaquilla que después de unas cuantas carreras terminaba sus días en el matadero municipal. Lo del Corpus era ya cosa seria y normalmente eran corridas de toros, a los que vino algún profesional de buen nivel con su cuadrilla y toda la parafernalia propia de la fiesta. Después entre Santiago (25 julio), San Roque (16 Agosto) y los Remedios (8 Septiembre) era un no parar, eso sí, casi siempre con novilladas, pero era un no parar.
Hoy la fotografía de Pacheco recoge una de las novilladas que durante mucho tiempo estuvo en el recuerdo de los aficionados, y que de alguna manera parece ser que fue la causa de que Don José hiciera varios reportajes fotográficos en la plaza, (varias fotos de las de la colección de 1908 ya están en el blog).
En aquel año de 1906 las niñas toreras habían acudido al coso de Pontevedra para una novillada el 4 de septiembre y el empresario de la plaza ourensana, que aun no habia desmontado el tinglado, se decidió a contratarlas para el dia de los Remedios. No le salió precisamente barato el tema al pobre del hombre, y si llega a saber lo que le espera mejor se hubiera ido a tomar "las aguas" con esas perras.
Cuentan las crónicas que las novilleras Pepita (Mola?) y Lolita (Pretel?) no debían andar en muy buena forma, aunque existió división de opiniones entre los que culpaban del fiasco a los novillos, que en algún reporte de prensa se definian como cabritillos y los que achacaban a la falta de empuje de las chicas el problema. Yo ni entiendo ni me gusta el toreo , así que me limitaré a contar lo que he leído: La Correspondencia de España del 10 de septiembre bajo el titulo: "En Ourense escándalo monumental" nos ofrece uno de los artículos más completos del evento; en el nos cuentan que Pepita diestra en el rejoneo hizo una faena impecable, matando a sus dos adversarios; el problema ocurrió con Lolita que intentado dar cuenta de su primero no conseguía atinar con la manera y este se resistía a dejarse matar, ¡Hay animalitos que tienen esa costumbre, les gusta vivir, qué le vamos a hacer!
el caso es que terminaron por enviarlo de vuelta a los corrales, eso sí con más cortes que un jamón en manos de mi hijo (esto va, por que al chico le gusta la loncha fina...).
Cuando le echaron el segundo a la arena parecía que la muchacha se iba a arrimar un poco mas, ¡pero na!.. Al final se hacía de noche y el público ya no tenía puros, ni almohadillas ni sombreros para tirar y comenzó a reclamar del empresario que devolviera el parné. Este como es lógico se hizo el loco y desapareció. Pero como los ánimos estaban caldeados y algunos tenían ganas de jarana en pública manifestación se fueron todos al gobierno civil (de aquellas en la hoy Diputación Provincial) y pidieron justicia a la autoridad.
El asunto se saldó con una multa al empresario de la plaza amén de la donación de los animales ya "toreados y muertos" para la beneficencia municipal.
Ese mismo año las ordenanzas de la fiesta a nivel nacional prohibieron el toreo a las mujeres, que durante años solo pudieron acudir a la plaza de espectadoras.
Si os apetece profundizar en el tema, las redes tienen unos cuantos artículos sobre el tema, como siempre: unos a favor y otros en contra; a mi como no me gusta el toreo ni ningún tipo de daño innecesario a los animales..... lo de que sea hombre o mujer quien lo haga. Como que me da igual.....