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miércoles, 26 de junio de 2019

Cosas de Fiestas II

Salida del Rallye año 68 parque de San Lázaro (foto Belay??)

        En los sesenta, se puso de moda aprovechar el tirón de las fiestas, para poner en marcha actividades paralelas, que finalmente consiguieron sobrepasar el límite festivo.

        Varios son los ejemplos de ello: El Rallye de Ourense nacía en el 67 de la mano, o mejor dicho de la pasión por el deporte del motor de un imprescindible Lalao Reverter y a día de hoy continúa siendo una prueba con una organización de altísimo nivel.


           En el 62 nacía otra de las pruebas deportivas que continúa vigente en el calendario nacional: "El Descenso del Río Miño" con el tiempo se le añadiría lo de internacional; además de muchos más cambios. Aquella primera prueba pocos lo recuerdan, pero según el programa de fiestas tenía unos horarios diferentes a los actuales.

"Descenso del Miño en Piraguas", a las 19,15 horas- Salida del tren especial que conducirá hasta los Peares a todos cuantos deseen presenciar y acompañar durante el descenso a los piragüistas que intervendrán en la I Prueba Descenso del Río Miño.
A las 20,00 horas-- Una salva de bombas anunciara la salida de los piragüistas desde Los Peares, en el mismo instante que el tren especial iniciará lentamente el regreso hacia Orense, con objeto de que todos los excursionistas puedan disfrutar de las incidencias

Nombres como el de Luis Gómez Andelo, Jacinto Regueira, Pedro Escudero y como no los primeros vencedores de la prueba, por el Grupo Covadonga de Gijón: Joaquín Tuya y Luis García Blanco quedaron para siempre en la memoria de la prueba, de la que se encargó durante muchos años mi buen amigo Adolfo Rego Pérez. (como presidente de la federación territorial Ourensana y como miembro de la comisión de fiestas de la ciudad).


     Y como olvidar el emblemático Festival Musical que durante aquellos años ponía a nuestra ciudad en el primer plano de la actualidad nacional "I Festival Hispano Portugués de la Canción del Miño" se organizó en el año 1965. Y como veis por el nombre, sus orígenes nos hablan de un intento de hermanar España y Portugal por medio de la canción con el Miño como punto de unión. 

    No voy a decir que no fuera buena idea, pero pocos años después (1968) se pensó que para abrirlo más al mundo interesaba cambiar el nombre, pasando a denominarlo  "IV Festival del Miño - Canción del Mundo Celta", incluyendo así en la invitación a los artistas del Reino Unido que quisieran participar.
    El festival desapareció en el 74 pero no sin dejar gran cantidad de anécdotas y momentos de gloria para la ciudad.