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martes, 10 de abril de 2018

San Lázaro de estrena


Fotógrafo Desconocido
Circa 1929?
ARDE1929000368
Dando forma al parque
Papel prensa, Publicado en el Informe "Avances de la provincia de Orense 1923-29" copia de Amador Rego.

  Detalles:  Después de un periodo en el cual se desarrollaba en esta zona la feria de la ciudad, se decidió reorganizar este espacio. Atrás quedaba la idea de que esto era el extra radio, y poco a poco se transformaba en el centro urbano que hoy es. Las calles aun era de tierra, pero al menos ya se habían adecentado las aceras. 
 La capilla del Santo reinaba en todo el espacio sin competencia de estatuas y fuentes antes de que la "desterraran" a Peliquín. Y aprovechando que tenemos aquí la capilla, voy a intentar responder algo que varios de vosotros me habéis preguntado últimamente, y sinceramente, desconocía, hasta que por casualidad encontré varios textos en mis viejos periódicos.

 ¿De donde procede  la tradicional quema de las Madamitas en el domingo de San Lázaro?.

    Antes de nada, aclarar que aunque hoy se limita al San Lázaro, (que yo sepa), esa manifestación festiva también se hizo en honor de nuestro San Roque, y con el tiempo se amplió a la Virgen de Los Remedios. Otro dato de interés, es que desde luego no se trata de una tradición exclusiva de nuestra Auria, muchas zonas, de Galicia al menos; la compartieron, de hecho en Pontevedra tuvo épocas de más  relevancia que en nuestra ciudad, llegándose a celebrar un concurso previo para escoger al encargado de confeccionar los muñecos a quemar.
Centrándonos en Ourense, tendríamos que irnos al siglo XIII, en tiempos del Obispo Lorenzo, el que sufragó la realización del Pórtico del Paraíso de nuestra catedral. De aquellas las epidemias eran algo excesivamente frecuente, la Peste, asolaba la provincia de manera constante y la población aterrada buscaba en lo divino protección ante ella. Humano o divino, la realidad es que acertadamente ya en aquellos tiempos se decidió que el enterramiento no era la mejor solución para los que fallecían por la peste, haciéndose obligatoria la incineración, “el fuego purificador”, de esa manera se pensó que en honor al Santo se podía representar la quema de esos cuerpo con unas figuritas más o menos semejantes. Naciendo así la tradición. 

Cuando en el siglo XV se popularizó el San Roque como protector de los enfermos de peste la ciudad lo convirtió en su patrón, y le “adjuntó”, también la quema de madamitas. Algo parecido puede haber sido lo ocurrido con Nuestra Señora de los Remedios.